La costa del Pacífico, en Colombia, es dibujada como un sitio magnífico para el avistamiento de ballenas, poseedora de un ambiente mágico y acogedor. Las aguas tropicales y el ecosistema marino que estos mamíferos acuáticos necesitan, las convierten en ideales para el apareamiento y para alumbrar sus crías.

Entre junio o julio y noviembre de cada año, esta costa colombiana complementa su paisaje, con el baile y los cantos de estos cetáceos, que llegan puntualmente. En este hermoso y paradisíaco sitio colombiano es frecuente ver ballenas cuando saltan, sus lomos y enormes colas, haciendo parte de una experiencia única.

En esta época Colombia recibe a miles de personas, visitantes internacionales, y colombianos que anhelan ver esta increíble experiencia natural de estos gigantes mamíferos. La travesía supera los 8.000 Km, saliendo del Polo Sur, hasta llegar al Pacífico en Colombia, extendiéndose por las playas de Nariño, Cauca y Chocó. 

Ya te hemos contado de playas increíbles en el caribe colombiano, como las Islas del Rosario. En este post, hablaremos de la otra costa… ¡Te contamos todo para que planees tu visita!

Las protagonistas del avistamiento de ballenas jorobadas

Conocidas como mamíferos de alas gigantes, por sus enormes aletas en el pecho de 5 metros, visitan la costa pacífica colombiana. Las llaman jorobadas o yubartas porque arquean el lomo cuando se sumergen, miden unos 18 metros, y los machos son más pequeños que las hembras.

Pesan unas 40 toneladas, nativas de los dos polos, pero en invierno migran hacia aguas cálidas para parir sus crías o para aparearse. Emiten un sonido bastante característico que puede llegar a más de 12 Km de distancia, y los machos lo usan para el cortejo.

Nos deleitan con saltos fuera del agua, coletazos, aletazos y sacan sus ojos del agua para mirar a su alrededor. Sus crías miden 3 metros y pesan hasta unas 2 toneladas y media, siendo mamíferos consumen leche, llegando a ingerir entre 70 y 140 litros diarios.

Migran a Colombia desde las gélidas aguas del Polo Sur en un viaje que supera los 8.000 Km y dura unos dos meses aproximadamente. Llegan en junio y se van a finales de octubre, las adultas pueden perder hasta 10 toneladas de peso, por solo alimentar a sus crías.

Los mejores sitios para el avistamiento de ballenas

Son 1.300 kilómetros de extensión del litoral Pacífico, y los sitios ideales para deleitarse con este atractivo turístico, es cuestión de seleccionarlos. Unos 100 mil turistas visitan los Parques Nacionales Naturales de Gorgona, Utría y Uramba Bahía Málaga, además de espacios delicadamente acondicionados por los pobladores, como:

Valle del Cauca:

Cali es la capital del departamento del Valle del Cauca, llamada “Sucursal del Cielo”, posee puntos estratégicos directos al Cauca y Buenaventura (Valle del Cauca. Aquí está el Parque Nacional Natural de Uramba Bahía Málaga, lugar preferido de los cetáceos para practicar su ritual de apareamiento, tiene más registros de avistamientos.

Es un destino turístico por excelencia, con aventuras extremas de paseos en kayak o en bote por el Pacífico, caminatas, espeleología y muchas otras actividades. Un primer plano para complacerse por completo del avistamiento de ballenas cuya enigmática magia rodea este evento natural.

Cauca:

El departamento del Cauca posee la enigmática Isla de Gorgona, a 90 minutos en bote desde el Guapi o cuatro horas partiendo de Buenaventura. Esta isla recibe la vista de las yubartas, y a unos 46 kilómetros del pueblo caucano está el Parque Nacional de Gorgona.

Las aguas de este oasis son famosas por su enorme biodiversidad y tesoro natural, además se registran muchas apariciones de estos mamíferos y sus crías. El parque cuenta con más de 10 variedades de cetáceos diferentes, 11 tipologías de arrecifes de coral y más de 70 variedades de aves migratorias.

Reportan más de 40 variedades de reptiles y unas 723 variedades de flora diferentes, un lugar ideal para descansar entre el mar y la selva. Y si quieres dormir con el canto de estos cetáceos, no hay un sitio mejor para ello, porque se extiende por toda la costa.

Chocó:

Al lado norte de la costa del Pacífico, puedes encontrar la Serranía del Baudó que se sumerge en sus aguas, formando hermosas bahías y ensenadas. Bajando al sureste, encontrarás caudalosos ríos y hermosos acantilados, en medio de una selva espesa, cuyas costas exhiben playas vírgenes con enigmáticos manglares.

Asentamiento de agrupaciones indígenas y afros que cuidan celosamente de la belleza y majestad de la naturaleza, donde solo accedes por mar o por aire. Es otro destino perfecto para un avistamiento de ballenas yubartas, que recibe a estos gigantes cetáceos que buscan un punto cálido para procrear y reproducirse.

Otro lugar de gran biodiversidad en el mundo, el Parque Nacional de Utría, considerado como “la sala de partos” de las ballenas yubartas. Igualmente, la Bahía Cupica, más al norte, en jurisdicción de Bahía Solano, son espacios deseados en época para mirar las ballenas jorobadas o yubartas.

☕️¿Prefieres hacer un viaje más gastronómico? ¡Visita la ruta del café!

Espectáculo esperado por propios y visitantes

Los lancheros, pescadores y visitantes esperan poder ver el vapor de agua en toda la línea del horizonte, cerca de las orillas del Pacífico colombiano. Es una señal inequívoca de la próxima visita de estos cetáceos jorobados, majestuosos animales que recompensarán la paciencia de quienes anhelan una imagen única.

Y es que son momentos de ensueño, completamente desconectados del mundo y del escándalo de la ciudad, donde vivirás una experiencia que desearás contar. La única condición que se exige cumplir, para que puedas disfrutar con este acontecimiento natural único, es respetar las instrucciones que gira el personal turístico.

Siempre deberás expresar un profundo respeto por cada elemento de la naturaleza, y por cada una de las zonas protegidas destinadas a estos mamíferos acuáticos. De esta manera se asegura que en el Pacífico de Colombia puedan parir sus crías, y tú, vivir la experiencia y disfrutar de la temporada de avistamiento de ballenas.

¿Qué te parece? ¿Planeas tu próxima escapada?