Entenderíamos que al ver el título de este artículo pensarás: «Pero si la red 5G aún no ha llegado a todo el mundo, ¿por qué nos deberíamos de preocupar por la 6G?». Y es, porque, aunque tú no lo veas ni escuches de esto, la tecnología de comunicaciones 6G ya se está desarrollando. A pesar de que las posibles repercusiones en la salud del 5G han provocado que su despliegue se paralice y se vea envuelto en la polémica, las grandes empresas tecnológicas y los países de todo el mundo ya están trabajando en su sucesor.
Pero, ¿qué es exactamente una red 6G y en qué se diferencia de la 5G? Además, ¿qué significa esta tecnología para el futuro y el bienestar de la humanidad? Si te preguntas sobre estas cuestiones tan relevantes, sigue leyendo. Hoy te explicamos los fundamentos del 6G.
La red 6G (sexta generación inalámbrica) es la sucesora de la tecnología celular 5G. Las redes 6G podrán utilizar frecuencias más altas que las redes 5G y proporcionar una capacidad sustancialmente mayor y una latencia mucho menor. Uno de los objetivos del Internet 6G es soportar comunicaciones con una latencia de un microsegundo. Esto es 1.000 veces más rápido -o 1/1000 de latencia- que el rendimiento de un milisegundo.
Se espera que el mercado de la tecnología 6G permitirá grandes mejoras en las áreas de imagen, tecnología de presencia y conocimiento de la ubicación. Trabajando conjuntamente con la inteligencia artificial, la infraestructura computacional 6G será capaz de identificar el mejor lugar para la computación; esto incluye decisiones sobre el almacenamiento, el procesamiento y el intercambio de datos.
Es importante señalar que la sexta generación de tecnología móviles no es todavía una tecnología en funcionamiento. Aunque algunos proveedores están invirtiendo en el estándar inalámbrico de próxima generación, las especificaciones de la industria para los productos de red habilitados para 6G siguen estando a años vista.
La tecnología 6G permitirá ahora velocidades de hasta un terabyte por segundo y una respuesta de 0,1 milisegundos. No se trata solo de velocidades de transmisión de datos más altas y respuestas más rápidas, aunque esas cosas mejorarán. Los objetivos de la red 6G incluyen una mejora masiva de la eficiencia energética, la seguridad basada en la mecánica cuántica, la optimización de la red impulsada por la inteligencia artificial, la integración con las redes de satélites y mucho más.
Aunque el 5G ha hecho posible el consumo de medios digitales en cualquier lugar y en cualquier momento, la tecnología del futuro debería permitirnos integrarnos en mundos completamente virtuales o digitales.
Con los avances de la inteligencia artificial, las máquinas podrán transformar los datos en razonamientos y decisiones que ayudarán a los humanos a comprender mejor nuestro mundo y a actuar sobre él. A medida que las máquinas domésticas e industriales actuales se transforman en enjambres de robots y drones polivalentes, las nuevas interfaces hápticas [interacción a través del tacto] y de pensamiento humano-máquina para controlarlas desde cualquier lugar deberían convertirse en parte integrante del futuro en red.
Nuestras casas, oficinas, fábricas y ciudades, estarán representadas en un mapa interactivo constantemente actualizado, capaz de predecir lo que ocurrirá en el mundo real. Podremos comunicarnos a través de hologramas y trabajar con superficies inteligentes situadas en tres dimensiones con información sobre la orientación de los objetos.
Con la tecnología de los hologramas podremos interactuar con personas, lugares, tiempos y objetos desde el lugar en el que nos encontremos. Nos permitirán disfrutar de espectáculos imposibles, como los conciertos de Tomorrowland celebrados durante años, recrear la presencia de los seres queridos, mantener encuentros cara a cara con personas lejanas.
Todo esto será posible gracias a las altas velocidades de transmisión, la baja latencia, el conocimiento del entorno, el posicionamiento y la orientación, la detección integrada, la red de redes, etc. La tecnología 6G puede garantizar una comunicación energéticamente eficiente, fiable, robusta y segura.
Las nuevas innovaciones también mejorarán los sistemas de localización, esenciales para la conducción autónoma y los procesos industriales por control remoto. Con la futura tecnología 6G se tendrán funciones de geolocalización altamente sofisticadas y con precisión exacta.
La carrera hacia el 6G está atrayendo la atención de muchos actores del sector. El proveedor de pruebas y mediciones Keysight Technologies se ha comprometido con su desarrollo. Las principales empresas de infraestructuras, como Huawei, Nokia y Samsung, han señalado que están trabajando en la I+D de la tecnología 6G.
Aunque las tecnologías 6G se encuentran hoy en fase de investigación, superar los obstáculos futuros, como la ciberseguridad, las normas mundiales del sector, la política de seguridad, etc., llevarán tiempo. Con el despliegue del 5G ya en marcha, no es demasiado pronto para empezar a planificar el 6G.
Los líderes de los sectores público y privado deben unirse para desarrollar la infraestructura, las nuevas tecnologías y las normas que apoyen las innumerables innovaciones que permitirá la red 6G. Ahora, más que nunca, debemos actuar para mantener el impulso de la tecnología 5G y allanar el camino a la 6G.
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