El concepto de sexo tántrico procede del antiguo hinduismo y de las ideas en torno al tantra. El tantra es una práctica antigua del hinduismo que se conoce desde hace más de cinco mil años. En sánscrito, la palabra tantra significa «entretejido”.

El principal objetivo cuando se tiene sexo tántrico es tener un contacto energético o espiritual durante un acto sensual y sexual. Esta práctica es lenta y el objetivo no es siempre alcanzar el orgasmo. En su lugar, se trata de sentir una conexión intensa e iluminada con la pareja o con uno mismo. 

Sexo tántrico: concepto

En términos generales, el sexo tántrico se practica para alcanzar una especie de éxtasis o iluminación, sin orgasmo. Esto tiene mucho que ver con el hecho de que el Tantra no es una práctica que tenga que ver con la satisfacción o el placer sexual, sino con una práctica espiritual. 

Para los practicantes hindúes, eso significa trabajar con un gurú para lograr la «liberación» a través del sexo tántrico, y para los practicantes budistas, el objetivo es la iluminación. A veces, el yoga tántrico es un componente. A veces, el tantra se practica sin sexo literal en absoluto. Y cuando lo hace, las personas que participan en el acto evitan hacerlo por puros principios de búsqueda de placer: en el hinduismo, se cree que hacerlo tiene consecuencias kármicas. 

En conjunto, es importante señalar que el tantra, en sus formas tradicionales, puede incluir el sexo, pero no se ocupa de la conexión sexual ni de una mayor intimidad, y menos aún de tener el mejor orgasmo de la historia.

Beneficios del sexo tántrico

Son muchos los beneficios del sexo tántrico. Echamos un vistazo a algunos de los principales que, sin duda, ayudarán a tu relación y le proporcionarán un descanso de cualquier monotonía.

• Mejor salud sexual.
• Ayuda a las mujeres con la anorgasmia.
• Ayuda a los hombres con la disfunción eréctil y eyaculaciones prematuras.
• Sacar el máximo partido al sexo.
• Liberar la vergüenza sexual y los bloqueos que te han estado frenando.
• Serás capaz de sintonizar con una energía sutil.
• Puedes acceder al deseo y al placer como nunca antes.
• Cuando se practica el sexo tántrico, se tiende a tener múltiples orgasmos.
• Hay una conexión holística entre tu mente, cuerpo y alma, con tu pareja.
• Tienes un nuevo nivel de conexión del corazón con tu pareja, lo que hace que el vínculo sea más fuerte entre los dos.

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¿Cómo tener sexo tántrico?

Si tú y tu pareja quieren experimentar con el sexo tántrico, consulta estos consejos básicos para empezar:

1. Prepara un espacio seguro. Es importante que el sexo tántrico se practique en un espacio que se sienta cómodo y seguro. Comienza eligiendo un cuarto de tu hogar límpialo, ajusta las luces, enciende velas o incienso y pon música relajante. Para prepararse para el acto, tú y tu pareja deben ducharse y buscar algo que les haga sentir relajados y sensuales. Deja tus teléfonos en otra habitación en silencio para evitar distraerse y poder mantenerte en el momento.
2. Comienza con la «mirada». Para empezar, siéntate recto frente a tu pareja y mírense a los ojos. Este proceso, a menudo llamado «mirada a los ojos» o «mirada al alma», puede incomodarles al principio, pero resiste el impulso de apartar la mirada. Tras unos minutos de contacto visual prolongado, deberías sentir que te relajas y entras en un lugar de conexión e intimidad aún más profundas. Puedes agarrarte de la mano durante este paso o sincronizar tu respiración para ayudar a mantener la sintonía y profundizar en la conexión mente-cuerpo.
3. Crear un circuito. Un paso común después de la mirada es un circuito de «manos en el corazón». Para crear el circuito, cada miembro de la pareja debe colocar su mano derecha sobre el corazón de su pareja y mantener su mano izquierda sobre su propio corazón. Sintoniza con el amor y el afecto que sientes fluir desde tu cuerpo y el de tu pareja, fomentando tu conexión física y espiritual.
4. Añade más juegos previos físicos. Después de establecer una conexión significativa, puedes añadir más juegos previos físicos para aumentar la excitación sexual. Los besos profundos y lentos o los masajes sensuales en todo el cuerpo son formas estupendas de aumentar la experiencia tántrica.
5. Llega hasta donde te sientas cómodo. Tú y tu pareja deben decidir hasta donde quieren llegar cuando practican el sexo tántrico. Si tú y tu pareja quieren tener relaciones, comienza con la postura del yab-yum, una posición sexual que representa la unión de las energías masculinas y penetrantes (Shiva) y las femeninas y receptivas (Shakti).
6. Experimenta con el edging. Es importante saber que en el sexo tantra no siempre es necesario que se llegue al orgasmo. Puedes hacer que dure más el momento de placer con el «edging», una práctica sexual en donde se llega casi al clímax en periodos, postergando el orgasmo para que el placer aumente.

Las mejores posiciones para el sexo tántrico

¿Interesado en explorar el sexo tántrico caliente y sudoroso? Presta atención y prueba estas fantásticas posiciones tantra de para probar el tantra.

1. Yab Yum

Mantener el contacto visual y sentir el cuerpo del otro es clave en el sexo tántrico, así que la posición Yab Yum es un lugar perfecto para empezar. Siéntate con las piernas cruzadas mientras tu pareja se sube encima y te rodea con las piernas. El acto sexual se inicia con un balanceo suave y lento que puede llegar gradualmente a uno de los mayores regalos del sexo tántrico: el orgasmo simultáneo.

La fricción de los cuerpos que se tocan hace que el momento de la penetración sea más satisfactorio que el de entrar directamente. Sus manos están libres para recorrer y estimular el cuerpo, y ambos están alineados para compartir besos.

2. La postura de la cuchara

Otra posición cara a cara que da lugar a muchos besos y contacto visual es la posición de la cuchara, pero con los dos miembros de la pareja enfrentados. Es fácil ponerse en esta posición: basta con poner la posición del misionero de lado. Dependiendo de tu nivel de comodidad, una pierna puede quedar debajo del hombre o ambas pueden estar juntas apoyadas sobre sus piernas. Concéntrate en sincronizar las respiraciones y en sintonizar con los movimientos del otro.

3. El doble piso

Entre las grandes posiciones sexuales para la satisfacción mutua y la intimidad se encuentra la de tu pareja tumbada encima y de espaldas a ti. Empieza por sentarte en la posición de vaquero invertida y recuéstate contra su pecho. Toma el control presionando tus pies contra la cama para crear un movimiento de deslizamiento. Disfruta de su cálida respiración en la nuca y escucha sus señales para frenar o acelerar.

¿Qué dices? ¿Te animas a practicarlo? 😉