Anthony era una persona común y corriente, que vivía con su madre y tenía un trabajo estándar, pero se dio cuenta de que no era feliz. Su cabeza daba vuelta y cada vez más fantaseaba con transformar su cuerpo. Por eso, cuando cumplió 24 años, decidió darle un revés a su vida y comenzó la transformación.
Sus últimos años los dedicó de lleno a convertirse en un xenomorfo, se mudó a la ciudad de Barcelona para recurrir a profesionales que lo ayudasen a llegar a ese objetivo.
Desde que comenzó con la transmutación, poco ha quedado de aquel Loffredo. Casi nada, pues la metamorfosis no solo alcanza a lo físico, sino a su cabeza interior.

Las modificaciones corporales del hombre alien

Cuando un ser humano decide cambiarse su aspecto físico, o hacerse un tatuaje o un piercing entra en el terreno de la modificación corporal. Pueden ser grandes o chicas, pero son alteraciones. Gracias a los avances de la tecnología, estas mutaciones pueden ser temporales.

Ahora bien, Loffreda puede resultar controversial, no hay modo de negarlo, pero si nos metemos de lleno y hacemos revisionismo, sabremos que hay culturas que defienden, este tipo de práctica, desde años atrás: sin ir más lejos, las africanas y asiáticas donde algunas mujeres, sobre todo, tienen incorporado el uso de joyas de gran tamaño y de peso para alargar algunas partes de su cuerpo.
Loffreda lleva siete años alterando su fisionomía. A él lo mueve el deseo de ser algo más que un humano: quiere ser un alien.

Qué hizo para llevarlo a cabo:

Tatuajes

Empezó diseñando sobre su cuerpo diferentes dibujos que lo ayudaron a oscurecer la piel y que, con sus tramas, se acercaron a la que posiblemente (porque nunca se vio uno) sea la piel de un alienígena. Pero sin lugar a dudas, lo más asombroso fue el tatuaje que se hizo en los ojos: decidió cubrirlos de negro, una operación muy riesgosa, en la que pudo haber perdido la vista.

Amputaciones

Esta es la parte, sin lugar a dudas, más reveladora y cruda de a dónde la mente humana puede llegar: comenzó cortándose las orejas, se practicó una “rinotomía” (se cortó la punta de la nariz) y se dividió en dos la lengua.
Pero llegó al extremo cuando decidió cortarse dos dedos de cada mano para convertirlas en garras. Esa última cirugía la compartió en su Instagram (@the_black_alien_project), y fue muy repudiado por sus followers que lo veían como una ofensa para aquellos que habían nacido con una discapacidad.

Perforaciones

Por último, tiene implantes en la cara y en los brazos, como si fueran deformaciones de la piel con las que logró darle a su fisionomía un aspecto más intimidante.
Loffreda o el “hombre alien” decidió ir por más y ya anunció que su próxima operación será la amputación de una de sus piernas. Algo que suma más polémica al asunto, ya que declaró que quiere colocarse una pierna robótica y así acercarse más a su objetivo estético.