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Para mantener una dieta saludable, es importante incluir alimentos que aporten los nutrientes necesarios. Las plantas comestibles son geniales porque ofrecen un montón de beneficios para la salud: te dan minerales, vitaminas y, lo mejor de todo, se pueden cocinar de mil maneras diferentes para incorporarlas fácilmente a tu dieta diaria.
Las plantas comestibles abarcan desde arbustos que pueden ir directo a tu ensalada hasta hierbas aromáticas que le dan un toque especial a tus platos. Dependiendo de la planta, no solo le dan sabor a tus comidas, sino que también pueden tener propiedades medicinales increíbles.
Algunas plantas se pueden comer completamente, desde la raíz hasta el tallo y los frutos que producen, mientras que otras no dan frutos y solo aprovechas la raíz o las hojas. Por ejemplo, con el aloe vera, te quedas con las hojas para obtener su gel interior.
Si quieres iniciarte en la jardinería, una forma fácil es comprar plantas que ya hayan brotado y estén en una maceta. Así, con unos cuidados básicos, ya puedes empezar a disfrutar de ellas.
Pero sembrar y cuidar tus propias plantas es todo un rollo positivo. Además de ser gratificante, te ayuda a liberar estrés. También es una manera genial de seguir de cerca el crecimiento de tus alimentos y asegurarte de que sean completamente naturales.
Entonces, si estás pensando en cultivar tus propias plantas comestibles en casa, aquí te compartimos algunas de las mejores opciones para empezar, sus beneficios para la salud, lo que necesitas y cómo empezar el cultivo. ¡Anímate!
Plantas que puedes sembrar en casa
Diversas plantas comestibles pueden ser cultivadas fácilmente en casa, tales como orégano, tomillo, diente de león, verdolaga, jengibre y acelga, entre otras. Algunas de las más simples de cultivar incluyen:
Espinacas
La espinaca, con hojas comestibles, es versátil y puede consumirse cruda o cocida en varios platillos como sopas, guisos e incluso hotcakes. Es un ingrediente común en jugos y licuados, ya que aporta beneficios como fibra, calcio, hierro, potasio, vitamina C y A. Para sembrar espinaca, solo coloca las semillas directamente en la tierra, a una profundidad de 2 cm y con espacios de 10 a 20 cm entre cada planta.
Romero
Aunque el romero es conocido como una especia popular, también tiene valor por sus propiedades medicinales al ser rico en principios activos y antioxidantes. Puedes sembrar romero colocando un esqueje de 15 cm en una maceta, con los 5 cm inferiores sin hojas y enterrándolo en la tierra.
Hierbabuena
La hierbabuena, con mentol y limoneno, se puede usar como antiséptico y antiinflamatorio. Para sembrarla, deja un esqueje en un vaso de agua hasta que desarrolle raíces y luego trasplántalo a una maceta amplia sin exposición directa al sol.
Albahaca
La albahaca, que aporta antioxidantes y vitamina C, se siembra en suelo húmedo y a poca profundidad. Necesita sol para germinar y se recomienda utilizar macetas con un mínimo de 10 cm de profundidad y ancho para permitir un crecimiento adecuado de las raíces.
Lechuga
Recomendada para personas diabéticas, la lechuga regula los niveles de azúcar en la sangre y contiene calcio, magnesio, hierro, potasio, así como vitaminas A, E, C, B1, B2 y B3. Puedes cultivar lechuga exitosamente con semillas y un semillero; coloca las semillas a 1 cm de profundidad y trasplanta las plantas directamente al suelo una vez que hayan brotado, cuidando que no estén expuestas directamente al sol y manteniendo la tierra húmeda.
Rábano
Con bajo aporte calórico, vitamina C y minerales como yodo y potasio, el rábano se siembra mejor a inicio de primavera en tierra húmeda y con exposición solar. Asegúrate de agregar un poco de fertilizante natural, como composta, para un crecimiento óptimo.
Citronela
Famosa por repeler mosquitos, la citronela también tiene propiedades medicinales. Para sembrarla, elige un área con tierra rica en nutrientes y sol, coloca las semillas directamente en el suelo y cúbrelo con tierra, o trasplanta un esqueje a una maceta de buen tamaño.
Cilantro
Muy presente en la cocina mexicana, el cilantro contiene vitamina K, A y C, así como minerales como calcio, hierro, potasio y fósforo. Si deseas sembrarlo, consigue una maceta de al menos 45 cm de diámetro y 25 cm de profundidad, coloca las semillas a poca profundidad y asegúrate de que reciba suficiente sol, regándolo con un rociador.
Pimiento morrón
Fácil de sembrar, el pimiento morrón ofrece antioxidantes, calcio, magnesio, vitamina C, fibra y capsaicina. Usa las semillas secas al sol, colócalas en un semillero con acceso a los rayos solares y a poca profundidad, y mantiene la tierra húmeda.
Trasplántalo al suelo cuando haya germinado lo suficiente, asegurándote de atar el tallo para soportar su crecimiento.
Estos alimentos son ideales para cualquier persona, desde niños hasta mujeres embarazadas, debido a sus beneficios nutricionales. ¡Anímate a cultivarlos y disfruta de alimentos frescos y saludables en casa!
Consejos para cultivar plantas en tu hogar
Planificación del espacio
Antes de decidir qué plantar, es crucial considerar el espacio disponible en tu hogar para destinar al cultivo. Si vives en un departamento o careces de un patio, es preferible optar por plantas que se puedan colocar en macetas en la cocina, comedor o terraza. En cambio, si dispones de un jardín amplio, puedes asignar un área específica para tus cultivos.
Preparación del área
Una vez seleccionado el lugar para tus plantas, inicia las adecuaciones necesarias. Asegúrate de contar con las herramientas necesarias, de que el espacio reciba la cantidad adecuada de luz o sombra según las necesidades de las plantas, y prepara la tierra si estás planeando un cultivo a mayor escala.
Involucrar a la familia
Sembrar tus propias plantas culinarias puede ser un pasatiempo individual, pero también puede convertirse en una actividad familiar. Divide las responsabilidades y permite que todos participen en el cuidado de los cultivos.
Investigación previa
Antes de decidir qué plantar, investiga sobre los requisitos específicos de cada tipo de planta. Ya sea tomates, pimientos, tomillo u orégano, cada planta puede necesitar elementos distintos, como macetas, recipientes reciclados o estacas de madera para sostener el tallo en crecimiento. Además, ten en cuenta la calidad de la tierra y el tipo de fertilizante necesario para crear el entorno adecuado para tus cultivos.
Consideración de la temporada
El clima y la temporada de siembra son factores determinantes al elegir qué plantar. Algunas plantas solo prosperan bajo condiciones específicas, mientras que otras pueden sembrarse durante todo el año, pero con un mejor crecimiento bajo condiciones climáticas favorables. Consulta en el vivero sobre las temporadas de siembra de las plantas de tu interés y rota tus cultivos según las estaciones.
Aprovechamiento de restos de cocina
Muchas plantas comestibles pueden cultivarse a partir de restos de frutas, esquejes o semillas sobrantes, como pimientos, aguacates, tomates, albahaca o lechuga. Los restos de productos de cocina pueden convertirse en el punto de partida para tus futuros cultivos.
Ventajas de tener un huerto en casa
Productos libres de químicos
Cultivar tus propios alimentos asegura que tu comida esté libre de pesticidas e insecticidas, ya que tienes control total sobre el proceso de crecimiento.
Fomento de áreas verdes
Aunque el espacio sea limitado, cada árbol o arbusto contribuye al aumento de áreas verdes. Plantar alimentos colabora directamente con la preservación de espacios naturales.
Respeto al medio ambiente: Evitar el uso de productos químicos agresivos en tu cultivo significa no liberar contaminantes en el entorno que te rodea, contribuyendo así al cuidado del medio ambiente.
Educación para niños
Involucrar a los niños en la siembra de un huerto es una manera efectiva de enseñarles acerca de diversos aspectos de la naturaleza, desde el proceso de germinación de las semillas hasta el cuidado de la flora y fauna.
Tiempo al aire libre
Dedicar tiempo a tu jardín es una forma efectiva de escapar de la monotonía diaria y disfrutar del aire libre.
Mejora de la alimentación
Tener plantas culinarias en casa facilita su incorporación en la dieta diaria, lo que puede resultar en una alimentación más saludable y rica en productos naturales.
Ahorro económico
Una de las ventajas más significativas de cultivar plantas comestibles en casa es el ahorro a largo plazo en los gastos del supermercado.
¡Dejar de comprar alimentos que puedes producir por ti mismo se traduce en un beneficio económico notable!
¿Listo para empezar?
