BUCEO EN CUEVAS: 5 TIPS PARA HACERLO DE MANERA SEGURA

Según los expertos, menos del uno por ciento de los buceadores recreativos tienen los conocimientos, las habilidades, el reconocimiento de las técnicas de propulsión o patada de aleteo, el juicio o las certificaciones para bucear en cuevas para practicarlo con la mayor seguridad posible. Este podría ser el motivo del número relativamente elevado de accidentes mortales de buceo en cuevas. 

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Las normas de seguridad más importantes para el buceo en cuevas

En el centro-norte de Florida (EE.UU.) hay cavernas y cuevas submarinas de agua cristalina, muy populares entre los buceadores. Si los buceadores siguen las reglas de seguridad importantes, bucear en este entorno es casi tan seguro como bucear en aguas abiertas. 

Sin embargo, si no se siguen las normas básicas de seguridad, el resultado puede ser fatal. Desde 1950, casi 400 buceadores han perecido en las cuevas y cavernas de Florida. La gran mayoría de estos buceadores no tenían formación formal en este tipo de buceo.

Utilizar tres fuentes de luz

Aunque han mejorado mucho en los últimos años, las luces subacuáticas siguen siendo uno de los equipos de buceo menos fiables. Incluso para las mejores linternas subacuáticas, la cuestión no es si la linterna fallará, sino cuándo. Quedar atrapado en la oscuridad total en una cueva submarina debido a un fallo de la linterna no es un problema fatal en sí mismo. 

Sin embargo, es un factor grave. La pérdida de la vista contribuye a la desorientación, lo que provoca una sensación de pánico. En estas condiciones, los buceadores suelen cometer errores que normalmente no cometerían con buena luz natural.

Un buceador que ha perdido la luz tendrá problemas para encontrar la línea de vida, una cuerda para la salida de la cueva.  Incluso si el buceador está en contacto físico con la línea de vida, tarda mucho más en llegar a la luz del día. La cuestión es si el buceador tiene suficiente gas de respiración para llegar a la salida.

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Haz un experimento: mide el tiempo que tardas en caminar desde el punto en el que te encuentras ahora hasta la salida más cercana. Repítelo con los ojos cerrados. Probablemente, tardarás más tiempo con los ojos cerrados. Además, si ves la salida más cercana, puedes aguantar la respiración, pero con los ojos cerrados (o sin la luz) es mucho más difícil porque no sabes exactamente a dónde tienes que ir.

Debido al peligro que supone la pérdida de luz, es recomendable que los buceadores lleven al menos tres luces de buceo: una luz principal y dos luces de seguridad para cada buceador. Aunque casi todos los buceadores de cuevas experimentan un fallo de la luz de buceo, la posibilidad de que un equipo de buceo con tres luces cada uno se quede sin luz es casi nula.

Manténte dentro de los límites de funcionamiento de los aparatos de respiración

Aunque solamente una de cada diez muertes es de buceadores de cuevas certificados, el 90% de estas muertes se producen debido a la exposición a profundidades de más de 131.234 pies / 40 metros (más allá de estas profundidades, el nitrógeno se vuelve tóxico). 

El principal efecto de la toxicidad del nitrógeno es la narcosis. A estas profundidades, factores como la narcosis por nitrógeno, las altas presiones parciales de dióxido de carbono y los mecanismos fisiológicos (que los expertos aún no comprenden) pueden conducir directamente a la muerte del buceador o contribuir sustancialmente a su muerte.

Con el creciente uso de varios gases para respirar, además del aire, también han aumentado las muertes causadas por la toxicidad del oxígeno – exposición al exceso de oxígeno (Nitrox – mezcla demasiado rica en oxígeno en aguas profundas) y la hipoxia (falta de oxígeno, respirando Trimix en aguas muy poco profundas).

Por estas razones, las principales organizaciones de formación de buceo técnico recomiendan que los buceadores se mantengan dentro de un límite de 1,4 atmósferas durante la inmersión, para evitar el riesgo de toxicidad de O2 que se produce a mayores profundidades (generalmente superior a 1,4, pero este límite se establece por seguridad) y un límite de 1,6 atmósferas durante la descompresión. Además, recomiendan que los buceadores no superen una profundidad de 130 pies, lo que equivale a una narcosis por nitrógeno.

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Es importante tener en cuenta que, mientras que pequeños grupos de buceadores altamente entrenados y experimentados exploran algunos sistemas de cuevas a profundidades superiores a los 100 metros, los buceadores recreativos pueden pasar toda una vida explorando los sitios de buceo en cuevas más populares de Florida y nunca necesitarán superar una profundidad de 130 pies.

Guarda dos tercios de tu gas para salir de la cueva

A lo largo de los años se han producido varios casos mortales en cuevas en los que las víctimas sabían cómo salir de la cueva o tenían muchas posibilidades de encontrar la salida. Simplemente, no tenían suficiente gas respirable para hacerlo.

Los buceadores recreativos, en particular, tienden a no pensar en salir a la superficie hasta que la presión de sus cilindros de buceo se reduce a entre 500 y 1000 psi. Parece una obviedad, pero si los buceadores utilizan 2.000 psi o más para entrar en una cueva, va a ser muy difícil salir a la superficie con solamente 1000 psi o menos. 

Si tenemos en cuenta los imprevistos, como la pérdida de visibilidad, la necesidad de compartir gas con otros conductores, etc., las posibilidades de que el buceador sobreviva en esas circunstancias son muy escasas. Los buceadores entrenados saben que deben mantener una reserva de al menos dos tercios de su volumen de gas para salir. 

Utiliza siempre una guía que te lleve directamente a la entrada de la cueva

Muchos accidentes mortales se producen cuando el buceador pierde la orientación. Un buceador, al entrar en la cueva, piensa que esta es la única salida, el único túnel. Imagina su sorpresa cuando, al girar para salir, el buceador descubre múltiples pasillos. De repente, está confundido.

Otro grave problema es el hecho de que los buceadores inexpertos y desorientados suelen elegir el agua clara para regresar. A menudo suponen que nadar en aguas claras les llevará a un lugar seguro, a la salida de la cueva. Irónicamente, esta decisión les llevará más lejos de la entrada. Muchos de los buceadores que murieron en las cuevas tenían suficiente gas respirable para salir de la cueva, pero fueron incapaces de localizar la salida de la cueva y desperdiciaron todo el gas buscando la salida.

Por lo tanto, una de las reglas más importantes del buceo en cuevas es: ¡utilizar siempre líneas guía que te lleven directamente a la entrada de la cueva!

Estar capacitado para el buceo en cuevas, ¡tener la formación adecuada!

Lo único que tienen en común nueve de cada diez víctimas del buceo en cuevas es la falta de una formación adecuada en materia de cuevas y de saber cómo moverse en este entorno único de la forma más segura posible. Por lo tanto, sé inteligente e investiga los Cursos de Buceo en Cuevas si quieres empezar a bucear en cavernas.

Muchas víctimas simplemente desconocen la necesidad de llevar suficientes luces, seguir la regla de los tercios o utilizar una guía. Incluso en algunos casos, las víctimas contaban con una certificación o formación de buceo en cuevas. Pero esto no es suficiente.